Mié. Nov 12th, 2025

Costa Rica avanza hacia un modelo de movilidad más sostenible, y los vehículos eléctricos (VE) se consolidan como una opción económica y amigable con el medio ambiente. Recorrer 100 kilómetros en un auto eléctrico representa un costo mucho menor comparado con un vehículo convencional de gasolina, lo que convierte a esta alternativa en una opción cada vez más atractiva para las familias y empresas del país.

Según estimaciones del sector eléctrico, un viaje de 100 km en un vehículo eléctrico usando carga rápida tiene un costo aproximado de ₡3.200, considerando un consumo promedio de energía de 17,5 kWh. Sin embargo, quienes aprovechan la carga en casa pueden reducir aún más sus gastos, pagando apenas entre ₡1.200 y ₡1.300 por la misma distancia recorrida, lo que representa un ahorro significativo frente a los ₡6.300 que podría costar recorrer esos 100 km en un vehículo de gasolina promedio.

Estos números demuestran que la transición hacia la movilidad eléctrica no solo ayuda a reducir la huella de carbono y proteger el medio ambiente, sino que también tiene un impacto directo en la economía familiar y empresarial. Además del ahorro en combustible, los vehículos eléctricos requieren menos mantenimiento que los autos convencionales, ya que cuentan con menos piezas mecánicas propensas al desgaste y no dependen de cambios de aceite ni otros insumos típicos de los motores de combustión.

Con la expansión de la infraestructura de carga y el incremento en la adopción de los VE, Costa Rica se posiciona como un país que impulsa la innovación tecnológica y la sostenibilidad, fomentando un modelo de transporte más limpio y eficiente. Expertos aseguran que, a medida que más personas y empresas opten por vehículos eléctricos, el ahorro económico y los beneficios ambientales se multiplicarán, consolidando a Costa Rica como un referente regional en movilidad sostenible.