El Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) avanza este 2025 con proyectos estratégicos que buscan fortalecer al sector náutico-pesquero y generar nuevas oportunidades para las comunidades costeras. La institución ha puesto en marcha acciones que integran formación técnica, innovación pesquera y reconversión productiva hacia el turismo sostenible.
Entre los logros más recientes destaca la optimización del curso de zafarrancho, fundamental para la seguridad marítima. Su duración se redujo de 105 a 72 horas, lo que representa un ahorro del 30% en tiempo efectivo. Asimismo, el curso de refrescamiento pasó de una semana a solo cuatro horas, con un ahorro del 80%, acelerando la actualización de competencias sin sacrificar calidad en la enseñanza.
En alianza con INCOPESCA, el INA impulsa el proyecto de palangre pelágico de media agua, una técnica innovadora que permite capturar especies como el atún grande y el pez espada en profundidades intermedias. Este sistema no solo aumenta el valor de mercado de las capturas, sino que también favorece la sostenibilidad de los recursos marinos, al ser más selectivo por talla y especie.
El INA también desarrolla un curso de construcción naval, mediante el cual se entregarán embarcaciones a cooperativas en Lepanto. A esto se suma la gestión conjunta con el Servicio de Guardacostas para donar embarcaciones decomisadas a comunidades pesqueras, fortaleciendo así su capacidad productiva.
Los impactos ya se perciben en lugares como Isla Venado, donde la reconversión de la pesca al turismo ha transformado la vida de los habitantes. “Isla Venado ha cambiado increíblemente en su forma de vivir. Gracias al INA y a la reconversión hacia el turismo, los pescadores han encontrado nuevas formas de empleo dentro de su propia zona”, comentó Allan Barrios, pescador beneficiado.
De igual manera, en los últimos meses se han impartido programas en mantenimiento de embarcaciones, operación de motores fuera de borda y diagnósticos técnicos en áreas como mecánica, electricidad, hidráulica y refrigeración.
Estas acciones consolidan al INA como un actor clave en el fortalecimiento del sector marítimo-pesquero, apostando por la innovación, sostenibilidad y competitividad de las comunidades costeras que dependen del mar como fuente de vida y desarrollo.