Costa Rica dio un salto importante en el Índice de Libertad Económica 2025 del Fraser Institute, al consolidarse como el país número uno de Centroamérica y el número catorce a nivel mundial.
El estudio internacional mide factores clave como el tamaño del gobierno, la estabilidad de precios, la protección de la propiedad privada, la libertad de comercio internacional y la regulación en materia laboral, crediticia y empresarial.
El ascenso del país refleja avances en la apertura económica, el fortalecimiento de las políticas fiscales y monetarias, así como un entorno más favorable para la atracción de inversión extranjera. Sin embargo, especialistas advierten que aún persisten desafíos importantes en temas de burocracia estatal, costos de producción y seguridad jurídica, aspectos que deben ser atendidos para consolidar la competitividad del país.
Con este resultado, Costa Rica se posiciona como referente en la región y como un destino atractivo para los negocios y la inversión, destacando entre los países de América Latina que buscan mejorar su desempeño en la economía global.


