El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, denunció este jueves que la embajada de Estados Unidos en su país habría amenazado con cancelar visas de funcionarios panameños si su gobierno estrecha lazos con la República Popular China.
Mulino afirmó que Washington le comunicó a su administración que las relaciones bilaterales con China podrían traer “consecuencias directas” para quienes ocupan altos cargos públicos, incluyendo la suspensión de sus permisos de ingreso a Estados Unidos.
La declaración generó fuerte polémica en la región, pues Panamá es considerado un socio estratégico por su Canal interoceánico y, a la vez, mantiene importantes vínculos comerciales con China, uno de los principales usuarios de esa vía.
El presidente panameño aseguró que no cederá ante presiones externas y que su país “ejercerá con soberanía sus decisiones diplomáticas”.
Desde Washington no se ha emitido aún un comunicado oficial en respuesta a las acusaciones, mientras que analistas internacionales señalan que este tipo de tensiones reflejan la creciente disputa geopolítica entre EE. UU. y China por la influencia en América Latina.
