Este jueves, San José fue sede de una jornada internacional en el marco del programa europeo EL PACcTO 2.0, donde la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) expuso los resultados de la llamada Operación Houston. El encuentro reunió a especialistas en seguridad y justicia de distintos países latinoamericanos para analizar una de las problemáticas más preocupantes de la región: el tráfico ilegal de armas de fuego.
Durante la exposición, la PDI presentó evidencia sobre cómo se estructuran y operan las rutas de tráfico de armas que cruzan fronteras desde Estados Unidos hacia distintos países de Latinoamérica, lo que alimenta al crimen organizado y a redes del narcotráfico. La investigación destacó el papel de estas armas ilegales como factor detonante de la violencia en la región.
Uno de los temas que más llamó la atención fue la referencia a las armas impresas en 3D, una amenaza emergente que plantea nuevos retos a las autoridades, ya que este tipo de armamento resulta difícil de rastrear y puede producirse con relativa facilidad mediante tecnologías de impresión avanzada. Además, se abordó la necesidad de fortalecer la trazabilidad de las municiones, un aspecto clave para poder investigar y desarticular estas redes criminales.
El taller en Costa Rica forma parte de los esfuerzos conjuntos para fortalecer la cooperación internacional y generar estrategias comunes contra el crimen organizado transnacional. Autoridades nacionales y representantes de distintos organismos de seguridad coincidieron en que solo con un trabajo articulado entre países será posible reducir la disponibilidad de armas ilegales y mitigar el impacto que tienen en la seguridad ciudadana.
Con este tipo de encuentros, Costa Rica refuerza su rol como punto de encuentro regional en la lucha contra las amenazas que afectan la estabilidad y la seguridad de toda Latinoamérica.


