La Liga Deportiva Alajuelense afronta esta noche uno de los partidos más importantes de su temporada. Los manudos visitan al Motagua en Tegucigalpa con la obligación de remontar el 1-0 en contra del juego de ida.
El panorama es claro. Los rojinegros necesitan ganar por dos goles de diferencia para avanzar directamente a semifinales. Si el triunfo es solo por un tanto, la serie se definirá en los penales.

Bajo el mando de Óscar Ramírez, Alajuelense viajó con la presión de representar al fútbol costarricense. La preparación del encuentro estuvo marcada por polémica: cuatro jugadores quedaron fuera por indisciplina, entre ellos John Paul Ruiz y Creichel Pérez.
A pesar de esas bajas, la Liga confía en la experiencia de referentes como Celso Borges, Joel Campbell y Ronald Matarrita. También espera el aporte del colombiano Jeison Lucumí y la seguridad en el arco del uruguayo Washington Ortega.
Motagua, por su parte, se aferra a la mínima ventaja lograda en Alajuela. El club hondureño apuesta a cerrar la serie en casa, con el impulso de su afición en el Estadio Nacional Chelato Uclés.
La mesa está servida para una noche de tensión. Alajuelense está obligado a remontar, mientras Motagua quiere sostener la ventaja y clasificar a semifinales de la Copa Centroamericana.


