La empresa alemana Dekra dejará de operar en Costa Rica como prestadora del servicio de inspección técnica vehicular el próximo 27 de julio de 2025. La salida se da luego de que la compañía no superara las etapas de precalificación establecidas en el proceso de licitación impulsado por el Gobierno para elegir nuevos operadores.
La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) ya aprobó una nueva metodología tarifaria que establece rangos mínimos y máximos para las inspecciones. Para vehículos livianos, por ejemplo, la tarifa de inspección irá de ¢4.898 a ¢5.794, y la reinspección costará entre ¢3.795 y ¢4.489.
Pese al cambio, el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi) asegura que el servicio continuará con normalidad. Las empresas Applus y Tüv Rheinland, de origen español y alemán respectivamente, avanzan en el proceso de precalificación y asumirán el servicio en la segunda mitad de 2025.

Ambas compañías deberán construir nuevas estaciones de inspección y contar con unidades móviles para atender la demanda nacional. Aunque aún no se ha definido cómo se dividirá el parque vehicular, se espera que operen en distintas regiones para garantizar una cobertura eficiente.
Para evitar interrupciones, Cosevi prorrogó el permiso de operación temporal otorgado a Dekra, lo que permitirá que continúe brindando el servicio durante nueve meses adicionales, hasta julio de 2025. Esto dará margen para que las nuevas empresas culminen sus procesos administrativos y de instalación.
Las autoridades reiteran que la transición será ordenada y sin afectar a los usuarios. Con el nuevo modelo, se busca mejorar la calidad del servicio, ampliar la cobertura nacional y ofrecer tarifas más transparentes dentro de los rangos regulados.