El 22 de marzo se celebra anualmente el Día Mundial del Agua, este día tiene como objetivo principal crear mayor conciencia sobre la importancia de este recurso fundamental para el bienestar humano y ecosistemas.
Actualmente, existe una crisis mundial del agua y es por eso que surge la necesidad de buscar medidas para abordarla de manera que como humanidad logre el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 6: Agua y saneamiento para todos antes del 2030.
A pesar de que este recurso es un líquido esencial en las actividades sociales y económicas, aún existen alrededor de 2.200 millones de personas sin acceso al agua potable, es decir, 1 de cada 3 personas.
Se estima que 1,4 millones de personas fallecen cada año por enfermedades relacionadas a un
saneamiento inadecuado.
Aunque el 70% de la tierra es agua, solo el 2,5% es agua dulce. Pero solo el 0,007% es apto para el consumo alimentario.
¿Porqué sucede esto?
Esto se debe a que el 69% está congelado en los polos, el 30% está como agua subterránea en aguas subterráneas y el 0,3% está en ríos y arroyos. Según estos números, el 97% del agua dulce líquida bajo nuestros pies se almacena en acuíferos, según la ONU.
A lo largo de la historia, los seres humanos han utilizado las aguas subterráneas para la mayoría de sus necesidades. Principalmente en el siglo XX, este recurso natural se convirtió en un elemento natural esencial para el bienestar social y el desarrollo económico, especialmente en los sectores agrícola e industrial.
Además, el agua subterránea sustenta el suministro de agua potable, el saneamiento, la agricultura, la industria y los ecosistemas.
Esta es la importancia de los acuíferos y sus principales riesgos:
Estas son algunas metas que busca alcanzar la ODS hasta 2030 Lograr el acceso universal y equitativo al agua potable de toda la población:
–Mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertimiento y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos.
–Aumentar el uso eficiente de los recursos hídricos en todos los sectores y asegurar la sostenibilidad de la extracción y abastecimiento de agua dulce para hacer frente a la escasez.
–Proteger y restablecer los ecosistemas relacionadas con el agua, incluidos los bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos.
–Proteger el agua es una tarea de todos, y el primer paso para minimizar su despilfarro es conocer el volumen de agua que usas de manera directa por tus actividades cotidianas, y el volumen total de agua dulce que se utiliza para producir los bienes y servicios que consumes.