Costa Rica cerró el primer trimestre del año con cifras alarmantes en materia de seguridad vial. Según datos oficiales, 174 personas perdieron la vida en accidentes de tránsito entre enero y marzo, convirtiéndose en el periodo más trágico desde que se llevan registros.
La Dirección General de la Policía de Tránsito informó que enero contabilizó 50 fallecidos, mientras que febrero marcó un récord histórico con 52 víctimas mortales, la cifra más alta en más de 30 años. Marzo no fue la excepción, con 72 muertes que confirman una tendencia preocupante en las vías del país.
Las principales causas de los accidentes siguen siendo el exceso de velocidad, la invasión de carril y las conductas imprudentes al volante. De los fallecidos, 96 eran motociclistas, lo que subraya la vulnerabilidad de quienes se movilizan en este tipo de vehículos.

Uno de los casos más recientes se registró el pasado 6 de abril en San Rafael de Oreamuno, Cartago. Una mujer que conducía una bicimoto perdió la vida tras colisionar con un pick-up. Según informes preliminares, habría irrespetado una señal de alto.
Las autoridades expresaron su preocupación por el aumento sostenido en la cantidad de víctimas y reiteraron el llamado a la responsabilidad. Insisten en que la prevención y el respeto a las normas de tránsito deben ser una prioridad para todos los actores viales.
Ante este panorama, se hace urgente reforzar los controles en carretera, fortalecer la educación vial y redoblar las campañas de concientización para revertir esta tendencia y salvar vidas.